Cuando Ramón Lamote salió de dar su clase, no lo podía creer. Allí estaba de nuevo, Ramón se preocupó por que tenía que llegar a casa a las 22:00 y eran las 21:40, por que su mujer le esperaba para cenar, Ramón estaba muy cansado, de dar clase a sus alumnos, -Mira tengo que llegar a casa a las 22:00, ¿no se que haces otra vez aquí? dijo Ramón, -Pues coge el ascensor, dijo la señora, -Señora aquí no ascensor, ¿no?, -no señora, -no creo que tengas que llegar ya, -señora, son las 21:50, y tengo que llegar a las 22:00, ¿y mis alumnos como que pasaron?, -les dejé yo, porque me eran muy simpáticos, hazme reír y te dejaré pasar, -señora, llego tarde a mi casa, ¿no habían cobrado la venta de los pisos tu y tu marido?, -Si, -¿Y por que sigue aquí?, -Me gusta estar aquí, -señora déjeme pasar llego tarde, -vale te dejo. Entonces, Ramón Lamote se fue bajando las escaleras mientras pensaba: -(¿Solo bastaba con eso?)
FIN
No hay comentarios:
Publicar un comentario